Todos los fichajes, los rumores, que si pago la cláusula, venga no que cambiamos cromos, que si yo he siempre he sido culé y, por supuesto, vengo al club de mis amores. Gracias Zoran Vekic, tú haces mi verano mejor.

jueves, febrero 09, 2006

Las palabras y el viento

Parte de la culpa de la histórica paliza al R. Madrid reside en la serie de chapuzas concatenadas que han terminado colocando a Gravesen como centro de gravedad (ojo, Roncero, que también sé hacer estos juegos) del equipo. El martes, instalado en la euforia, se sinceraba y soltaba joyas del tipo: "Los jugadores me elogian" o "siento que Guti y yo nos entendemos bien en el centro del campo". Como siempre, la culpa de todo, de la prensa. A ver qué dice hoy, el simpatiquillo jugador danés. Y es que hay que amarrar bien las palabras, y cuanto menos se las saque a pasear, mejor. Que si no, se las lleva el viento.